Los virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) son dos especies de lentivirus (un género de retrovirus) que causan una infección que, si no se trata, conduce al síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
Así pues, el VIH conduce al SIDA, pero algunas personas ignoran que la primera etapa, el VIH, puede manifestarse con algunos síntomas ya en las primeras semanas tras la infección, cuando la carga viral es más alta y el sujeto es más contagioso.
Saber que el VIH también es sintomático puede ser muy útil. Si se desarrollan uno o varios síntomas como consecuencia de una relación sexual sin protección, el sujeto puede darse cuenta de ello y hacerse examinar a tiempo, iniciando así el tratamiento adecuado lo antes posible.
Primeros síntomas de la infección por VIH: cuáles son y la importancia de la prevención
Los virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) son dos especies de lentivirus (un género de retrovirus) que causan una infección que, si no se trata, conduce al síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA). Así pues, el VIH conduce al SIDA, pero algunas personas ignoran que la primera etapa, el VIH, puede manifestarse con algunos síntomas ya en las primeras semanas tras la infección, cuando la carga viral es más alta y el sujeto es más contagioso. La primera etapa de la infección se denomina "primera infección".
Por lo tanto, si alguien ha mantenido relaciones sexuales sin protección con una persona cuyo estado serológico desconoce, y dentro del primer periodo desarrolla síntomas parecidos a los de la gripe (el primer periodo en el que aparecen estos síntomas es de una a cuatro semanas después de la infección), debería someterse a la prueba del VIH, pero también evitar las relaciones sexuales sin protección hasta que se conozca el resultado. También hay que recordar que el diagnóstico precoz es de vital importancia, sobre todo para el control de la enfermedad en los años siguientes.
Fiebre, cansancio y agotamiento, sudores nocturnos, ganglios linfáticos muy inflamados, no sólo cerca de la garganta, dolor de garganta y erupciones cutáneas son los principales síntomas de la primera infección por VIH. Estos síntomas pueden desarrollarse individualmente o incluso combinados
También hay síntomas menos comunes en esta fase temprana de la infección, que pueden ser más difíciles de detectar. Estos síntomas incluyen dolor en los músculos y articulaciones, diarrea, náuseas y vómitos, y trastornos de la mucosa oral y vaginal.
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Los síntomas pueden indicar una infección por VIH, pero también tener una causa diferente. Además, su intensidad varía de una persona a otra y pueden durar varios días o incluso varias semanas antes de remitir. Además, algunas personas no presentan ningún síntoma.