Cuando disminuye la intensidad de la sangre dirigida al cerebro, puede producirse una pérdida de conciencia y, por tanto, un desmayo.
El desmayo, mecánicamente, se manifiesta por una pérdida repentina del tono muscular, que provoca una caída hacia el suelo, con pérdida de la coloración facial. Antes del desmayo, se puede experimentar debilidad, náuseas y problemas de visión y audición. Por lo general, la pérdida de conciencia dura unos dos minutos.
Las causas de los desmayos pueden ser tan variadas como los síntomas que los preceden. (Fuente: Hospital Humanitas de Milán)
Cuando disminuye el aporte sanguíneo al cerebro, puede producirse una pérdida de consciencia y, por tanto, un desmayo. El desmayo, mecánicamente, se manifiesta por una pérdida brusca del tono muscular, que provoca una caída hacia el suelo, con pérdida de la coloración facial. Normalmente, la pérdida de conocimiento dura unos dos minutos. Las causas de los desmayos pueden ser tan variadas como los síntomas que los preceden. (Fuente: Hospital Humanitas de Milán)
Las causas de los desmayos pueden ser muy variadas. Van desde los episodios provocados por situaciones de estrés a los causados por el miedo, pero también los desmayos como consecuencia de emociones fuertes, dolor intenso, consumo de drogas o alcohol, tensión arterial baja, hipoglucemia o convulsiones. Los desmayos también pueden producirse por levantarse demasiado deprisa.
Otras causas de desmayo pueden ser ciertas enfermedades como la diabetes, el ictus, el infarto de miocardio, la cefalea, la artrosis cervical o incluso la hipertrofia ventricular y la embolia pulmonar.
Es muy poco probable que el desmayo sea repentino y sin síntomas. En la mayoría de los casos, en el momento inmediatamente anterior al desmayo, la persona puede experimentar mareos, aturdimiento, visión borrosa, náuseas, hormigueo en los labios o las puntas de los dedos, palpitaciones o dolor en el pecho. (Fuente: msdmanuals.com)
En el caso de desmayos que no estén provocados por una situación concreta (como el miedo, por ejemplo), siempre es conveniente consultar al médico para saber si hay que examinarse o no. Es importante consultar al médico sobre todo si se desmaya después de una caída, si tiene más de 50 años, si el desmayo está asociado a la diabetes o al embarazo, pero también si el fenómeno está relacionado con convulsiones, latidos cardíacos irregulares, dolores persistentes en el pecho.